La vida continúa igual para Las Palmas y Zaragoza
El empate no le vale a ninguno. Rubén Castro adelantó a los canarios y Álvaro Vázquez puso el empate para los aragoneses. Peñalba fue expulsado.
Acabaron vacíos, titánico esfuerzo el de ambos contendientes, y además con la misma sensación. Tras el empate de esta noche, Zaragoza y Las Palmas suman un punto que, a nivel clasificatorio, apenas les vale, tan alejados como siguen del objetivo primordial del ascenso. Al menos los visitantes ofrecieron muestras evidentes de la mejoría experimentada con Víctor Fernández al frente, esa que les ha llevado a sumar 11 puntos de 18 posibles, mientras que Las Palmas, a diferencia de otros partidos, no se encapsuló con el 1-0. Ambos siguen, en cualquier caso, a años luz de lo que se les exige.
En los primeros minutos tenía el Zaragoza a Las Palmas en medio de su rondo, más no creaba peligro. Se respetaban tanto que, hasta que se le anuló justamente un gol a Cala, el partido no desperezó. Y lo hizo a lo grande gracias a los locales, que se adelantaron en el minuto 15 tras una pérdida de Verdasca que aprovechó Fidel para ver por el retrovisor a Ruiz de Galarreta, quien le dio a Rubén el 1-0 en bandeja de plata. Se vino arriba Las Palmas, que pudo sentenciar en los cinco minutos siguientes por medio de Mir y, de nuevo, Cala.
El Zaragoza no generaba peligro, y eso que Pombo y James hacían lo que querían. Sin embargo, tuvo que ser Álvaro Vázquez, tras aprovechar una mala entrega de Galarreta, quien empatara al filo del descanso.
Mejoría. Salió con nuevos y mejores bríos tras el descanso el Zaragoza, que no supo aprovechar el jugar los últimos 15 minutos con uno más tras la expulsión de Peñalba, dos amarillas prácticamente seguidas por protestar. Las Palmas jugó a la heroica casi al final, pero ya era tarde. Con mucho pundonor y poco acierto, ambos equipos firmaron un trabajado empate que sabe a poco. Ocurre que ya han perdido demasiado y este, en fútbol, se evapora demasiado rápido.
