Tribunal de apelaciones frena en seco a juez que quería acusar de desacato al Gobierno de Trump
Un tribunal de apelaciones frenó al juez Boasberg en su intento por declarar a Trump en desacato tras no obedecer una orden judicial.
Un tribunal federal de apelaciones en Washington D.C. votó a favor de frenar de manera temporal al juez Boasberg en su intento por declarar a la administración de Donald Trump en desacato, luego de no obedecer una orden judicial sobre la deportación de inmigrantes a la megaprisión del CECOT, en El Salvador.
La decisión se tomó con una votación de 2-1, donde los jueces Gregory Katsas y Neomi Rao, designados por Trump, votaron a favor de pausar el proceso contra el presidente, mientras que la jueza Nina Pillard, nombrada por Obama, se mostró en contra.
Las acusaciones del juez Boasberg contra Trump
El juez Boasberg había comenzado el proceso de desacato en contra de la administración Trump luego de que esta ignorara una orden judicial sobre el envío de inmigrantes a la megaprisión del CECOT. Según argumenta Boasberg, que el presidente desobedezca un fallo judicial no solo va en contra de la Constitución, sino que también pone en riesgo el equilibrio de poderes en el país.
La disputa entre el juez y Trump comenzó exactamente después de que el líder de la Casa Blanca invocara la Ley de Enemigos Extranjeros, que data de 1798, para justificar la expulsión de migrantes venezolanos por tener supuestos vínculos con la organización criminal del Tren de Aragua.
En aquel momento, el juez Boasberg bloqueó el uso de esa ley para evitar el despegue de dos aviones con inmigrantes venezolanos a El Salvador. No obstante, pese a la orden del juez, ambos vuelos siguieron su curso, completando el traslado a la megaprisión del CECOT.
Desde entonces, Boasberg y Trump han estado inmersos en una disputa. Por su lado, el republicano sugirió iniciar un juicio político contra el juez por su intento de frenar las deportaciones; mientras que Boasberg intentó declarar a Donald Trump y su administración en desacato, especialmente cuando muchos de los inmigrantes envíados a El Salvador no cuentan con antecedentes penales.
Actualmente, Estados Unidos y El Salvador tienen un acuerdo de migración para que la administración Trump envíe inmigrantes detenidos al CECOT a cambio de una tarifa.
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