Ford va más allá con Red Bull
“El acuerdo inicial se centró en la electrificación, pero se ha convertido en algo más que eso”, asegura Rushbrook, jefe de Ford Performance, socio de los energéticos a partir de 2026.


Apenas se han disputado seis grandes premios y queda el grueso de la temporada por delante, pero con el cambio tan importante que se avecina en la Fórmula 1 es normal pensar en 2026. De hecho, todo el desarrollo de los equipos gira en torno a lo limitados que están por las reglas que vienen y los fabricantes llevan años preparando el salto a las nuevas unidades de potencia que utilizarán combustibles sintéticos y repartirán protagonismo entre la parte de combustión y la eléctrica. En el caso de Red Bull, su transición es aún más crucial con la llegada de Ford.
Con Honda uniendo su futuro a Aston Martin, la escudería energética fabricará sus propios motores con su unidad de Red Bull Powertrains en Milton Keynes en estrecha colaboración con Ford. De hecho, aún más estrecha de lo que se había establecido en un primero momento tal y como asegura Mark Rushbrook, jefe de Ford Performance, a Autosport: “El acuerdo inicial se centró principalmente en la electrificación, pero se ha convertido en algo más que eso y podemos contribuir en tiempo real a la fase de desarrollo”.
“Fabricamos piezas a diario y las enviamos desde Dearborn (su fábrica de Michigan) a los laboratorios de Milton Keynes. Eso nos impulsa a hacer cosas que nunca habíamos hecho, ni siquiera en otros deportes de motor o programas de producción”, cuenta Rushbrook sobre una asociación que “se fortalece cada día desde la primera conversación que condujo a la firma del contrato”. “Y para ser sinceros, el trabajo ya había comenzado antes de la firma”, agrega el director sobre la relación que lleva de vuelta a Ford a la F1.
El desarrollo, “por buen camino”
En cuanto a la fase en la que se encuentra la unidad de potencia que impulsará al próximo Red Bull y que rivalizará con el mencionado de Honda, Ferrari, Mercedes y Audi (que también se estrenará en 2026), dice que va “por buen camino en el desarrollo del motor de combustión interna y los componentes eléctricos”: “Todavía queda mucho trabajo por hacer y mucha durabilidad por demostrar, pero en cuanto a la colaboración, la transparencia y la contribución mutua, es justo lo que queríamos e incluso más de lo que pensábamos”.
Lógicamente, no saben en qué punto están sus rivales, eso lo dictará el asfalto, pero ellos están satisfechos porque van cumpliendo sus objetivos internos, aunque “siempre hay excepciones”. “Nunca se alcanza el 100% en todo. En cuanto a alcanzar las cifras de potencia, sin duda, pero las pruebas de durabilidad deben coincidir y seguir ese ritmo. A medida que se desarrolla y se obtiene más potencia, se realizan pruebas de durabilidad. Así que básicamente es potencia, durabilidad, potencia, durabilidad”, cierra Rushbrook.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos