La indescifrable crueldad del fútbol

No hay nada que una ración doble de dormidina no pueda superar. Y eso que lo de Milán fue cruel en exceso, incluso para algo tan cruel como suele ser el fútbol. Nos hipnotiza precisamente por ese grado de sadismo que nos parte por la mitad en demasiadas ocasiones. El fútbol no sabe de justicia ni de empatía. Solo es futbol, un arcano indescifrable. Cuando en alguna ocasión la fortuna te sonríe, y solo por comparación con el dolor acumulado en tantos duelos, el fútbol ejerce de bálsamo de fierabrás, que a Don Quijote y a los armados caballeros sanaba de todas las heridas del amor y la guerra. A nosotros, el fútbol nos sana todos los quebrantos de golpe: la hipoteca variable, los amores no correspondidos, las cuitas familiares… No hay término medio, todo o nada. De ahí su grandeza.
Hay algo más cruel para un culé que haber visto el partido contra el Inter; no poderlo ver, estar en directo en un programa de televisión e ir consultando a ratos la web del As. Irte al descanso seguro ya de la inapelable derrota, volver a ilusionarte con el gol de Eric García, soñar con los penaltis tras el gol de Olmo y acariciar una heroica remontada en campo ajeno con el postrero tanto de Raphinha. Y entonces, en el último instante, llega el bachiller Sansón Carrasco y de un mandoble te descabalga del caballo, de tus sueños y de la final de la Champions. Empiezas en ese momento a maldecir tu mala suerte, a preguntarte por qué de niño te regalaron un balón y la camiseta del Barça una mañana de Reyes y no un microscopio para aficionarte a la medicina o una lupa para ser entomólogo.
Pero a la mañana siguiente, tras la resaca de la ración doble de dormidinas, piensas ya en el siguiente partido, que además será el clásico. Y crees de nuevo que no hay nada más bonito que el fútbol, que la Liga está al alcance de la mano. Y vuelves a pensar también en lo aburrido que sería este mundo si no te hubiesen dejado los Reyes una camiseta del Barça y un balón de reglamento.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos